martes, 31 de mayo de 2016

Mayo 13_16 El Mensaje que os dejó Mi Hija en Fátima, ha sido manipulado por la misma Iglesia.

Mayo 13_16 El Mensaje que os dejó Mi Hija en Fátima, ha sido manipulado por la misma Iglesia.ImprimirE-Mail
Rosario vespertino


Temas:

  • Quiero que seáis verdaderos instrumentos y, al decir verdaderos, es decir, que vuestra opinión no cuenta, sois instrumentos y el instrumento es silencioso, el instrumento no opina, el instrumento se deja mover, el instrumento confía.
  • Ya estáis sobre el tiempo, en cualquier momento se empezará a desatar lo más fuerte de la Purificación. Os vuelvo a hacer el llamado, como Madre que Soy de vosotros, Mis hijos, para que os acerquéis a vuestro Dios y a Mí, vuestra Madre y al Cielo entero.
  • Habéis escuchado del Mensaje que os dejó Mi Hija en Fátima, el cual, no se os ha dado completo y ha sido manipulado por la misma Iglesia, para que no se conozca parte de él, en donde se muestra la verdad que se vive dentro de la Iglesia y de lo que sucederá en vuestro Mundo.
  • Vivid en oración profunda y esto os ayudará a que os vayáis alejando de la vida de ahora, vida que os ha estado llevando a la muerte, a la muerte espiritual y aún a la muerte física.
  • Dejaos mover plenamente por Mi Santo Espíritu, para que en ningún momento vosotros perdáis la Paz y, sobre todo, las Virtudes con las que vais a contratacar la maldad de satanás.



Mensaje de Dios Padre y la Santísima Virgen María a J. V.



Primer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Quiero que seáis verdaderos instrumentos y, al decir verdaderos, es decir, que vuestra opinión no cuenta, sois instrumentos y el instrumento es silencioso, el instrumento no opina, el instrumento se deja mover, el instrumento confía.

Os he dicho que os he venido preparando a vosotros, para estos tiempos de lucha, de lucha espiritual. Ciertamente, la gran mayoría de vuestros hermanos, no se han enterado de lo que he hecho con vosotros y quizá, hasta miembros de vuestra propia familia no sepan hasta donde os he llevado, hasta qué grado de espiritualidad habéis alcanzado para entender todo lo que os he dado y lo que vendrá.

Cuando estudiáis, empezáis desde lo más bajo, desde lo elemental, vais creciendo y vais entendiendo cosas, que en grados menores, no entendíais. Cuando llegáis a la profesional y queréis hacer un posgrado, una maestría o un doctorado, ahí se os da un conocimiento mayor y más preciso.

Así estáis ahora vosotros Conmigo, Mis pequeños, os estoy dando un Conocimiento mayor y más preciso de cómo se vendrán los acontecimientos y lo que sucederá en la Tierra y en el Universo entero.

Ciertamente, Mi Santo Espíritu, os irá dando los pormenores para prepararos para lo que necesitaréis para proteger a vuestros hermanos y vencer las fuerzas de satanás.

Lo que necesito de vosotros, es donación y humildad, Mis pequeños. Os lo he pedido ya, varias veces, pero quiero que lo entendáis perfectamente, ya que van a ser momentos difíciles, vistos a ojos humanos, pero no así, si lo estaréis viendo a través de Ojos Divinos, que  son los Míos, porque Yo voy a estar en vosotros y, lo que hagáis, Yo lo estaré haciendo a través de vosotros.

No quiero que vosotros os apropiéis de nada de lo que vaya a salir a través de vosotros  y remarco, a través de vosotros, porque vosotros no seréis los que originaréis lo que salga de vosotros, que serán Fuerzas, Potencias, que ni siquiera conocéis y que no podríais vosotros crearlas.

Quiero que seáis verdaderos instrumentos y, al decir verdaderos, es decir, que vuestra opinión no cuenta, sois instrumentos y el instrumento es silencioso, el instrumento no opina, el instrumento se deja mover, el instrumento confía y así quiero que os manifestéis ante Mí, Mis pequeños.

Grandes cosas haréis y el Mundo, la gran mayoría, ni lo sabrá. Protegeréis a muchas almas y pasaréis desapercibidos para la gran mayoría de vuestros hermanos, pero no para Mí, Mis pequeños. Lo único que os debe importar, es el saber que estáis trabajando para Mí y Yo seré Quien califique vuestro trabajo, de eso es lo único que os debéis preocupar, de servirMe, por Quien Soy y con la responsabilidad que os he dado.

Soy vuestro Dios, necesito instrumentos para que satanás quede convencido de que, con los pequeños, Yo puedo hacer grandes cosas y que, además, con vuestra pequeñez, podréis vosotros destruir la maldad de aquél que se cree grande.

Dejaos mover por Mí, Mis pequeños, para que Yo pueda hacer de vosotros grandes almas en el Reino de los Cielos, con los regalos que os voy a dar.Sencillez ante todo, Mis pequeños, sencillez.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio. Habla la Santísima Virgen María.
Sobre: Ya estáis sobre el tiempo, en cualquier momento se empezará a desatar lo más fuerte de la Purificación. Os vuelvo a hacer el llamado, como Madre que Soy de vosotros, Mis hijos, para que os acerquéis a vuestro Dios y a Mí, vuestra Madre y al Cielo entero.

Hijitos Míos, satanás se ha encargado de quitar Mi Devoción a muchos hermanos vuestros, Soy vuestra Madre y siempre estaré pendiente de vuestras necesidades espirituales y aun humanas y materiales.

Satanás ha engañado a hermanos vuestros que, aunque, ciertamente, están en sectas o en otro tipo de grupos espirituales pero que buscan a Mi Hijo, Me han hecho a un lado, porque satanás sabe que Soy Yo Quien lo va a vencer.

Aun a pesar de ello, Yo estoy pendiente de vuestras necesidades y actúo ayudándoos, a los que no Me invocáis, gracias a la intercesión de aquellos que Me aman.

Vosotros, los que Me amáis y creéis en Mí, pedidMe, Mis pequeños, que ayude a vuestros hermanos que no Me buscan, que no confían en Mí, que no Me conocen. Una madre, siempre va a estar cuidando de los hijos, aún a pesar de que la traten mal. El amor crea lazos de unión muy fuertes y, a pesar de que se le trate mal a la madre, la madre no puede olvidar a los hijos que ella llevó en su vientre.

A todos vosotros os llevo, si no en Mi Vientre, sí en Mi Corazón. Os cuido y, principalmente, os protejo, porque conozco las fuerzas de satanás, sois pequeñitos, débiles, que no podéis competir contra las fuerzas de satanás y, por eso, estoy pendiente de protegeros en todo momento.

Ciertamente, el hombre se ha desprotegido y ha quedado a merced de las fuerzas de satanás, al no cumplir con lo que Mi Hijo os pidió, y con lo que Nuestro Padre Dios os había pedido, desde antiguo, con los Mandamientos.

Al no cumplir los Mandamientos, al no cumplir con lo que se os ha pedido, ciertamente quedáis desprotegidos, no os imagináis cómo os veis a nivel espiritual y, por eso, las almas caen fácilmente en las tentaciones que os pone satanás.

Cuando un alma busca estar con Nuestro Dios, desde ése preciso momento tiene la ayuda de Mi Esposo, el Santo Espíritu de Amor. Os ayuda a que os deis cuenta cuando hay un ataque, cómo os podéis preparar y atacar, cómo podéis ayudar a algún otro hermano que necesite de protección y de cuidados y, esto, solamente lo lográis, Mis pequeños, estando en continua relación con el Cielo.

Ciertamente se os protege, continuamente, desde el Cielo, de diferentes formas y vosotros, ni siquiera os dais cuenta de ello y, como no os dais cuenta, no agradecéis y, por eso, os digo que estos tiempos son muy difíciles, porque se va a manifestar fuertemente el poder de satanás ante todos vosotros, y es cuando os daréis cuenta cómo habíais sido protegidos, cómo habíais sido cuidados desde el Cielo y, vosotros, no agradecíais estos cuidados.

Esto, Mis pequeños, se llama Fe. Si no hay Fe, vosotros no os protegéis, porque no creéis en lo que se os ha dicho.

Todo esto lo tenéis en las Sagradas Escrituras. La misma Iglesia os va guiando para que entendáis todas estas situaciones favorables para vuestra alma y aún para vuestro cuerpo, pero, ¿qué ha hecho el hombre? Se le hace más fácil hacerse a un lado, no buscar lo que está al alcance de vuestra mano y, como no queréis compromisos con Nuestro Dios y Señor, hacéis vuestra propia vida.

Ahora es cuando os vais a dar cuenta del error en el que vivisteis, no utilizasteis Sabiduría Divina, vivisteis bajo una necedad humana, que os va a acarrear muchos problemas y dolores.

Nuestro Dios, en Su Santísima Trinidad, os ha dado infinidad de Gracias, Bendiciones, cuidados, para que vuestro paso sobre la Tierra no fuera tan doloroso, tan penoso, por los ataques de satanás durante vuestra vida, pero el hombre, siempre creyéndose más sabio que Nuestro Dios, hace su propia vida y se aparta de todos los cuidados que Nosotros les teneMos a las almas. Luego caéis en problemas, en los cuales ya no podéis salir y, es cuando os acordáis que existe Dios y, muchas veces, ya es demasiado tarde.

Ciertamente, hay infinidad de almas que se han condenado por ésa falta de Fe, no creyeron que la vida aquí, en la Tierra, era una misión qué completar y que ibais a tener muchos ataques de satanás. No os protegisteis, no se protegieron y terminaron muy mal.

Os vuelvo a repetir, Mis pequeños, la lección para que la entendáis: Ya estáis sobre el tiempo, en cualquier momento se empezará a desatar lo más fuerte de la Purificación. Os vuelvo a hacer el llamado, como Madre que Soy de vosotros, Mis hijos, para que os acerquéis a vuestro Dios y a Mí, vuestra Madre y al Cielo entero, a Mi Esposo, al Señor San José, a los Santos Ángeles y Santos. La lucha va a ser muy fuerte, no estáis preparados la gran mayoría de vosotros. Debéis regresar con Fe a Nosotros, para que seáis protegidos, satanás quiere destruir toda la Creación, os queremos proteger, dejaos, Mis pequeños, entended que la situación que estáis viviendo, es grave.

Se os repite una y otra vez, pero, si no queréis escuchar y poner de vuestra aparte, padeceréis un castigo tremendo que os impondrá satanás.

Acercaos a Mí, Mis pequeños, dejadMe que os cuide, que os guíe y que os ayude en vuestra salvación.
Os amo, Mis pequeños, que la Paz quede con vosotros.

Tercer MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Habéis escuchado del Mensaje que os dejó Mi Hija en Fátima, el cual, no se os ha dado completo y ha sido manipulado por la misma Iglesia, para que no se conozca parte de él, en donde se muestra la verdad que se vive dentro de la Iglesia y de lo que sucederá en vuestro Mundo.

(Lenguas…) Hijitos Míos, cuando escucháis sobre la Advocación de Mi Hija, en Fátima, inmediatamente pensáis en situaciones tremendas y, ciertamente, lo serán, pero para aquellos que han hecho el mal, aquellos que han vivido en el mal, aquellos que han atacado todo lo que viene de Mí, vuestro Dios.

Mi Hija, la Siempre Virgen María, ha sido Mensajera de Mi Voluntad, prácticamente, en todos los países del Mundo. Ella os ha llevado Mi Palabra, Mi Voluntad, pero, sobre todo, Mi Amor en Mi Misericordia. Os ha ido buscando a todos vosotros, en Nombre Mío, para alcanzar vuestra salvación eterna, y ya es el tiempo, Mis pequeños, en que se tiene que dar este cambio anunciado desde que Mi Hijo estuvo sobre la Tierra.

Habéis escuchado del Mensaje que os dejó Mi Hija en Fátima, el cual, no se os ha dado completo y ha sido manipulado por la misma Iglesia, para que no se conozca parte de él, en donde se muestra la verdad que se vive dentro de la Iglesia y de lo que sucederá en vuestro Mundo. Ciertamente, se os avisa la gran tribulación que tendrá la Iglesia y toda la humanidad, tribulación causada por desastres que eliminarán una gran parte de toda la Tierra y de sus habitantes.

Todo será transformado, todo será purificado, la maldad de satanás ha entrado hasta los más altos niveles de la Iglesia. La masonería se ha apoderado de la dirección de todo cuanto sucede en la Iglesia, en los gobiernos, en todo el Mundo. Cardenales, obispos, sacerdotes, presidentes de todo el Mundo, se arrodillaron ante satanás.

Hace tiempo os dije que eran trece los que manipulan a todo el Mundo, son los súbditos de satanás. Trece familias que son las que gobiernan y tienen todo el poder en vuestro Mundo. La maldad de satanás está atrás de ellos, les ha prometido poder, riquezas a niveles increíblemente altos para la mentalidad humana y, tontamente, se dieron en cuerpo y alma para servir a satanás.

Todo está controlado por estas trece familias alrededor del Mundo. Ellas deciden las guerras, la caída de la economía, las hambrunas que se producen durante las guerras, las pestes, causadas por ellos mismos, al cultivar organismos que os matan. Todo está manipulado por ellos, porque satanás os quiere destruir.

Afectan a los alimentos y los inoculan con sustancias nocivas para que os vayan destruyendo poco a poco, crean microorganismos, bacterias, virus, para destruiros.

¡Hay tanto mal alrededor vuestro, Mis pequeños! y por eso, se os insistía tanto que no os separarais de Mí. Ciertamente, la lucha es espiritual, pero también ataca a nivel humano.

Gracias a aquellos hermanos vuestros que viven en la oración, en el sacrificio, en la penitencia, en la donación. Gracias también a aquellos que llevan Mi Palabra a todos aquellos hermanos que no Me conocen. Gracias a aquellos que están esperando el Regreso de Mi Hijo y que imploran ya Su Presencia en la Tierra. Se os ha anunciado que el tiempo se terminó y que ya es el momento de la Purificación y de la eliminación del mal que satanás ha provocado entre vosotros.

¡Ay de vosotros!, los que pertenecéis a ésas trece familias, que habéis provocado tanto mal en tiempos pasados y actuales, seréis eliminados todos vosotros, toda vuestra generación, anterior y posterior, seréis eliminados de la faz de la Tierra y de las profundidades de la Tierra, nada quedará de vosotros, ni el recuerdo quedará después de esta Purificación.

¡Ay, de vosotros!, los que hicisteis pacto satánico, y que estuvisteis aparentando estar Conmigo dentro del Recinto Santo, en la Iglesia que Mi Hijo os dejó. El fuego en el Infierno será aumentado para vosotros, porque aparentabais estar Conmigo, respetando Mis Leyes, Mi Amor, cuando realmente le estabais dando culto a satanás, aún dentro del Recinto Santo, ofreciendo la vida de pequeños hijos Míos, en holocausto a satanás.

¡Ay, de vosotros! Los que os dejasteis influenciar por todo lo que satanás os ponía a vuestro alcance y haciéndoos olvidar que pertenecíais a Mí y que, a pesar de que Yo os consentía, preferisteis hacerle caso a aquel que os destruía en vuestra mente, en vuestro corazón, en vuestro cuerpo.

¡Ay, de aquellos científicos! Que se dejaron también llevar por la maldad de satanás, aceptando sumas millonarias para producir alimentos y medicamentos, aparentemente buenos, pero que llevaban un trasfondo de destrucción contra vuestros hermanos. Vuestro dolor en los Infiernos será tremendo, porque a infinidad de almas destruiste por llenaros de un dinero lleno de sangre.

¡Ay, de vosotros! Los que destruisteis, también, a través de la venta de drogas, la salud, física, mental y espiritual de vuestros hermanos, padeceréis inmensamente en el Infierno vuestro mal, muchas almas destruisteis, muchas almas se perdieron por vuestra culpa.

Los trece, los trece se vendieron a satanás y ésos trece, han producido tanto mal, que no os imagináis. Escogieron a su dios y será su verdugo eternamente, en el lugar destinado para satanás, será ahora y para siempre, el lugar de estos trece y de todos aquellos, alrededor del Mundo, de arriba y de abajo, que se vendieron a él.

AgradecedMe, Mis pequeños, los que estáis Conmigo, los que Me amáis, por todo el mal que voy a eliminar, porque os amo, porque consiento a los Míos, a aquellos que, a pesar de haber tenido toda esta maldad a vuestro alrededor, que estos trece producían, no caísteis en sus redes, las redes de satanás.

La maldad será eliminada de la Tierra y viviréis un tiempo de Paz, de Amor, de Alegría, de crecimiento espiritual, como no lo ha habido antes, desde la caída de vuestros Primeros Padres. No os imagináis, Mis pequeños, el regalo tan grande que os voy a dar, por haber permanecido Conmigo. La fidelidad y el amor también recibirán su premio, manteneos, pues, Mis pequeños, en ésa Esperanza de lo que os he anunciado que pronto vendrá.

Ya no os pido que oréis por aquellos que se vendieron a ésos trece y que ellos, a la vez, se vendieron a satanás. Os pido por todos aquellos que, todavía, tienen una luz interior que los puede llevar a su salvación.

Os Bendigo, Mis pequeños y gracias porque os habéis mantenido en los Principios Divinos que Yo os pedí y que Mi Hijo realizó en la Tierra, para el bien de todos vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: Vivid en oración profunda y esto os ayudará a que os vayáis alejando de la vida de ahora, vida que os ha estado llevando a la muerte, a la muerte espiritual y aún a la muerte física.

Hijitos Míos, tratad, de ahora en adelante, de hacer una vida espiritual más profunda, llevada a una realidad, a la cual, os he ido preparando y anunciando; una realidad que padeceréis, en un principio y que gozaréis en un tiempo breve posterior.

Pedidle a vuestro Santo Ángel de la Guarda, en quien debéis poner toda vuestra esperanza, que os vaya guiando hacia las Verdades Divinas, que él os vaya abriendo las puertas hacia esa nueva realidad que se os aproxima y, así, estaréis ya olvidando el pasado que dejaréis y esperando el futuro que gozaréis.

Vuestro Santo Ángel de la Guarda os viene cuidando desde vuestra concepción y os conoce perfectamente, confiad en él e invocadlo continuamente a lo largo del día y en la noche. Él os llevará a ése conocimiento que debéis tener vosotros de todo lo que os voy a dar, os irá preparando en forma personal, puesto que os conoce perfectamente, para que vayáis entendiendo hacia dónde os voy a llevar.

Tenéis, también, la ayuda de todos los Santos Arcángeles y de los Coros Angelicales, a quienes os he pedido que invoquéis continuamente, especialmente vosotros, los que estáis siendo preparados para la misión fuerte que llevaréis.

Vivid en oración profunda y esto os ayudará a que os vayáis alejando de la vida de ahora, vida que os ha estado llevando a la muerte, a la muerte espiritual y aún a la muerte física.

Tendréis un cambio muy bello, Mis pequeños, Yo os he anunciado la transfiguración de cuerpos y almas, dejaos, dejaos mover y transformar en libertad, Soy vuestro Dios, vuestro Dios Amor, vuestro Dios que os cuida, vuestro Dios que os ama.

Ciertamente, la vida que estáis viviendo, ha hecho que vosotros caigáis en desconfianza de todos aquellos que os rodean, pero, os repito, Soy vuestro Dios y quiero solamente vuestro Bien, dejad ésa desconfianza y venid a Mí, como niños, como niños confiados, como niños que buscan a su padre, que los va a cuidar, que los va a proteger.

El mal pasará y los escogidos gozarán Mi Bien, dejad, pues, que sea Yo, Mis pequeños, el que guíe vuestros pasos de ahora en adelante y vosotros, confiados en Mi Sabiduría y en Mi Amor, os llevaré a gozar del premio para las almas que Me aman, que Me han buscado y que se han llenado de Mí.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Dejaos mover plenamente por Mi Santo Espíritu, para que en ningún momento vosotros perdáis la Paz y, sobre todo, las Virtudes con las que vais a contratacar la maldad de satanás.

Hijitos Míos, dejaos mover plenamente por Mi Santo Espíritu, para que en ningún momento vosotros perdáis la Paz y, sobre todo, las Virtudes con las que vais a contratacar la maldad de satanás.

Os he dicho que a la maldad se le vence con la Bondad, y la Paz os llevará a que en los momentos difíciles que se os presentarán, actuéis con Sabiduría. La Paz os dará ésa seguridad de estar actuando en el Bien.

Yo estaré en vuestro interior y os estaré llevando por caminos de seguridad, tanto para vosotros, como para los vuestros.

Satanás no puede contra Mi Amor y, por eso, debéis hacer vida en el Amor y esto es, llevándoMe continuamente en vosotros. Ya, desde ahora, debéis haber empezado a tratar de amar aún a aquellos que os hacen el mal, que os atacan, que no quieren vuestro bien.

Las Virtudes os llevan a tener paciencia contra aquellos que os molestan y que os quitan ésa paz interior. Por eso os digo que con la Paz, el Amor y las Virtudes, vosotros estaréis protegidos contra los ataques del enemigo.

Cuando se vengan los acontecimientos, os he dicho, que os seguirán hermanos vuestros, porque al reflejar paz y amor y esa vida en las virtudes, ayudaréis a muchos de vuestros hermanos a que también ellos absorban ésa paz y ése amor y estén tranquilos en los momentos en los que quiere satanás que estéis desesperados y que podáis cometer algún error grave.

Confiad, os vuelvo a repetir, confiad plenamente en que Yo estaré con vosotros, las pruebas serán fuertes, pero, confiad, confiad en que saldréis adelante.
Gracias, Mis pequeños.
 www.diospadresemanifiesta.com

Mayo 10_16 Orad, los que sabéis orar y los que no sabéis, aprended, para que os podáis salvar.

Mayo 10_16 Orad, los que sabéis orar y los que no sabéis, aprended, para que os podáis salvar.ImprimirE-Mail
Rosario vespertino.

Temas:

  • Necesito que vosotros Me estéis llamando continuamente y que enseñéis a vuestros hermanos, que no saben hacerlo, que también lo hagan, para que éste clamor que necesito que se escuche en el Cielo, haga que Mi Padre Me envíe ya con vosotros.
  • Os ha dicho, Mi Señor y Mi Dios, que se os tomará en cuenta lo que hicisteis con el alma de los hijos que se os encomendaron; si ésas almitas se llenaron de amor y lo transmitieron, lo vivieron y mueren en el amor, su salvación es segura.
  • La perfección que os he estado pidiendo, desde siempre, es como quiero y deseo que crieis a Mis pequeñitos que os doy a cuidar, son Míos, y permito que vosotros los tengáis, que los crieis, que les enseñéis lo mejor, pero empezando con vuestro ejemplo y luego con vuestra palabra.
  • He puesto Mi Confianza en cada uno de vosotros, os envié al Mundo para producir un Bien y, así, como tenéis en la Parábola de los Talentos, Yo también quiero recoger de vosotros el treinta, el sesenta, el noventa, el cien por ciento de lo que invertí en vosotros.
  • Los hogares así Bendecidos, darán mucho fruto, vivirán en la alegría, nada les faltará, Yo, vuestro Dios, lo he prometido y mantengo Mi Palabra.



Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo y  la Santísima Virgen María a J. V.


Primer Misterio. Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Necesito que vosotros Me estéis llamando continuamente y que enseñéis a vuestros hermanos, que no saben hacerlo, que también lo hagan, para que éste clamor que necesito que se escuche en el Cielo, haga que Mi Padre Me envíe ya con vosotros.

Hijitos Míos, escucho el clamor de las almas que Me llaman, que imploran Mi Regreso, que desean que ya esté entre vosotros.

Conozco vuestro corazón, conozco vuestro amor hacia Mí, conozco lo que vosotros estáis viviendo en este valle de lágrimas, en el que estáis sufriendo. Conozco que vuestro buen corazón, necesita ya un alimento limpio, fuerte, grande y un ambiente en el que vuestro amor se pueda desarrollar infinitamente, y esto va a ser cuando Yo esté entre vosotros, Mis pequeños, y por eso agradezco vuestro clamor, vuestra llamada, a que venga ya a estar entre vosotros, y así será, Mis pequeños.

Ciertamente, necesito que vosotros Me estéis llamando continuamente y que enseñéis a vuestros hermanos, que no saben hacerlo, que también lo hagan, para que éste clamor que necesito que se escuche en el Cielo, haga que Mi Padre Me envíe ya con vosotros.

Mucho mal existe en el Mundo y en el Universo entero y este mal tiene que terminar. Mi Misericordia Divina hará que el fuego de amor, de vuestro corazón, se apague con Mi Regreso y Me podáis gozar ya, Mis pequeños, y podáis construir el Mundo que necesito y que quiero que viváis.

Mucha maldad ha diseminado satanás, muchas almas se están perdiendo con su veneno. Os he dicho que ya estáis en el tiempo preciso, para que se dé toda la Purificación y Mi Regreso entre vosotros.

Ciertamente, Mi Regreso es inminente y por eso debéis, también, vosotros, apresurar el paso. Debéis prepararos, debéis estar vestidos con vuestras túnicas limpias, o sea, vuestra alma purificada.

No os imagináis, Mis pequeños, cuánto es Mi Deseo de estar ya entre vosotros, entre las almas que Me aman, entre las almas que aprecian todo lo que Yo hice por vosotros. ¡Cuánta alegría os daré y cuánta alegría también Me daréis! Soy vuestro Dios, Soy vuestro Salvador, estoy con vosotros; seguid insistiendo por Mi Regreso, Mis pequeños, para que el Padre, os repito, Me envíe, ya, entre vosotros.
Gracias, Mis pequeños.

Segundo Misterio. Habla la Santísima Virgen María.
Sobre: Os ha dicho, Mi Señor y Mi Dios, que se os tomará en cuenta lo que hicisteis con el alma de los hijos que se os encomendaron; si ésas almitas se llenaron de amor y lo transmitieron, lo vivieron y mueren en el amor, su salvación es segura.

¡Bendita tarea la que Me encomendó Mi Hijo en la Cruz, Mis pequeños, Ser la Madre de todos vosotros!

La mujer tiene ése instinto maternal por naturaleza pero, en particular, la Misión que Me estaba concediendo Mi Hijo, era extender, todavía, mucho más, ése instinto maternal que Me llevaba hasta lo más profundo del ser de cada uno de vosotros, porque iba a ser el cuidado total de cada uno de vosotros. Y con ello, Me da la tarea de luchar contra satanás para protegeros contra sus ataques, porque él no quiere que entréis de nuevo al Cielo, pero especialmente con vosotras, las mujeres, él no desea que vosotras transmitáis, no solamente vida de cuerpo, sino, especialmente, vida de alma.

Vosotras tenéis una misión grandísima, inmensa, dais vida de cuerpo y, también, junto con vuestro esposo, dais vida de alma.

Cuidáis el crecimiento sano del cuerpo, le vais protegiendo pero, principalmente, con vuestro ejemplo, vais llevando a vuestros hijos a que conozcan a Mi Señor y Mi Dios y Me conozcan a Mí, vuestra Madre Santísima.

¡Si pudierais ver vosotros las almas de vuestros hermanos!, de aquellos que, desde pequeños, tuvieron la Bendición de que sus padres les hubieran enseñado a tener una vida espiritual, amándoNos, ya desde pequeñitos y, luego, aquellas almas a las cuales sus padres no les enseñaron a amarnos: éstas almas padecen mucho, no crecen integralmente y muchas veces, terminan con problemas muy graves, porque les falta el alimento del alma.

El alma necesita un alimento fuerte, que es el Amor. El Amor, primeramente, hacia Nosotros, hacia Nuestro Padre, en Su Santísima Trinidad, hacia Mí, vuestra Madre Santísima, hacia Mi esposo de la Tierra, San José, hacia los Santos Ángeles y Santos. Cuando vosotros sabéis que hay alguien que os está viendo, que os está cuidando, que os protege de todo mal, vosotros, internamente, os sentís seguros, camináis por la vida seguros de que estáis siendo protegidos, cuidados, guiados desde el Cielo; crecéis en cuerpo y alma en una forma natural y sana.

En cambio, aquellos que no tienen ése soporte espiritual, que no se les dieron Enseñanzas de vida espiritual, crecen con temores; las acechanzas de satanás son más fuertes, porque sabe satanás que no tienen protección y que las puede vencer fácilmente. No tienen guía espiritual porque no saben a quién acudir. Las almas que no tienen ese soporte desde pequeñitos, caminan erráticamente en el Mundo y tienen más problemas que aquellos que sí han tenido una protección espiritual, una Enseñanza desde pequeños, en el Amor de Dios.

Vosotras, las que sois madres, vuestra responsabilidad es muy grande. Ciertamente, compartís la responsabilidad con vuestro esposo, pero la vuestra es mayor, porque pasáis más tiempo con los hijos, y ellos aprenden más del ejemplo que da la madre que del padre, por eso la madre, y la madre debe estar llena de Virtudes.

Un alma femenina, virtuosa, es un tesoro, porque va a transmitir Vida, la Vida espiritual que ella misma vive y se trasmite en forma natural, porque ésa alma sabe amar, primeramente, a Nuestro Dios y Señor, después a Mí, a los Ángeles, a los Santos. Estas almas respetan y aman la Vida del Cielo y transmiten ése amor a los hijos y, así, la descendencia de ésa madre que nos ama, se va multiplicando y, además, va siendo bendecida por Nuestro Dios y por Mí, porque está dando Vida, Vida del alma a sus hijos y a su descendencia.

Os ha dicho, Mi Señor y Mi Dios, que se os tomará en cuenta lo que hicisteis con el alma de los hijos que se os encomendaron; si ésas almitas se llenaron de amor y lo transmitieron, lo vivieron y mueren en el amor, su salvación es segura, pero, si no les enseñasteis a vivir en el Amor, si no os preocupasteis en enseñar a amar a Nuestro Dios, a Mí, vuestra Madre, al Cielo, éstas almitas, en primera, no se desarrollarán perfectamente, como os dije. Vivirán con temores, pero, también, vivirán llenándose de pecados, porque no tienen el freno que les dan Nuestras Enseñanzas, las Enseñanzas de Nuestro Dios, en Su Santísima Trinidad y lo que Yo Misma os he dejado, también, en Mis Apariciones.

Cuidados tenéis muchos, pero no acudís a ellos y no transmitís la Verdad a vuestra descendencia. Si ésas almitas, que se os encomendaron, no se salvan, pagaréis por ello, porque mucho de lo que pudieron haber hecho y no lo hicieron, fue por vuestra culpa, no les enseñasteis a vivir cómo se vive en el Cielo, que es lo que os Enseñó Mi Hijo Jesucristo.

Ciertamente, hay muchas madres condenadas y otras sufriendo fuertemente en el Purgatorio, porque no supieron o no quisieron transmitir vida, vida espiritual. Un alma, sin éste alimento espiritual, está vacía y no produce frutos y a eso vinisteis a la Tierra, a salvar almas con el ejemplo que debéis dar.

Cread, Mis pequeños, almas virtuosas, para que lleguen a su santificación y, de esta forma, den mucho fruto, de padres a hijos, de hijos a nietos y demás descendencia y así serán bendecidas estas familias, que fueron criadas en el Amor y en las Virtudes.

Salvad almas, Mis pequeños, salvadlas, a través del ejemplo que deis; por que viváis ése amor de Mi Hijo en vosotros y lo transmitáis a vuestros hermanos.

Orad por ésas familias, familias estériles, en lo espiritual, que no han transmitido Vida y, peor aún, pueden haber hasta destruido a ésas almitas, que pudieron haber hecho mucho. PedidMe por ellas.

Soy vuestra Madre, la Siempre Virgen María, pedidMe por las almitas que no se han llenado del Amor de Nuestro Dios, pedidMe por su salvación, Mi Hijo, os lo agradecerá infinitamente.
Gracias, Mis pequeños.

Tercer Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: La perfección que os he estado pidiendo, desde siempre, es como quiero y deseo que crieis a Mis pequeñitos que os doy a cuidar, son Míos, y permito que vosotros los tengáis, que los crieis, que les enseñéis lo mejor, pero empezando con vuestro ejemplo y luego con vuestra palabra.

Os he hablado, Mis pequeños, sobre el ejemplo y sabéis que la palabra mueve, pero el ejemplo arrastra.

Vuestros hijos, desde que son pequeñitos, son como esponjas, observan y luego repiten. A veces los subestimáis y por creerlos tan pequeñitos, creéis que no se dan cuenta de muchas cosas, pero son más perceptivos de lo que os imagináis y, si vosotros no vivís como os he dicho, en las Virtudes y en el Amor, vuestros pequeñitos, tarde o temprano, repetirán lo que vosotros les habéis enseñado, consciente o inconscientemente.

Ciertamente, hay niños más perceptivos que otros, pero, tarde o temprano, vosotros mismos os daréis cuenta cuánto de vosotros ellos han tomado y, eso, nunca se los podréis quitar, porque fueron la base de su educación, es lo que vivieron primeramente en el hogar, es el ejemplo que han vivido de sus progenitores.

Por eso, os he dicho que, tenéis un gran compromiso Conmigo, Soy vuestro Dios y Creador y a Mí Me gusta lo que es  perfecto y lo que es santo y, si vosotros apenas estáis esperando algún hijo, que vais a ser padres por primera vez, tomad esto muy en cuenta, Mis pequeños: que todo lo que hagáis, frente a vuestros hijos, aun siendo pequeñitos, lo van a ir tomando como forma de vida, porque lo están viendo hacer a aquellos que son sus padres y que, supuestamente, los están educando en la mejor forma que pueden; pero si vais a ser padres, Mis pequeños, ya no es pretexto, Yo no quiero que vosotros deis un ejemplo mediocre de vida espiritual y, aún, de vida humana.

La perfección que os he estado pidiendo, desde siempre, es como quiero y deseo que crieis a Mis pequeñitos que os doy a cuidar, son Míos, y permito que vosotros los tengáis, que los crieis, que les enseñéis lo mejor, pero empezando con vuestro ejemplo y luego con vuestra palabra. Si vosotros destruís la mentalidad, la vida espiritual de un pequeñito, seréis juzgados severamente.

En cambio, si hacéis de vuestros hijos almas buenas, almas de ejemplo, almas que puedan llegar a la santidad y con eso dar un gran ejemplo, para que otras también logren ése objetivo, vuestro premio será grande, no solamente al final de vuestra existencia, sino durante vuestra existencia, porque, si les enseñasteis a actuar Bien, ellos responderán con otro Bien y vosotros iréis gozando, desde la Tierra, ése Bien que vosotros transmitisteis, porque el bien, produce más Bien.

El mal, también va a producir maldad y, ciertamente, vosotros recibiréis también ése mal durante vuestro paso por la Tierra; pero lo más malo que vosotros conseguiréis, es Mi Juicio por vuestros hijos, lo que  hicisteis con ellos, cómo les destrozasteis su vida espiritual y, sobre todo, si por vuestra causa, por vuestro mal ejemplo en palabras y obras, alguno o todos vuestros hijos, se condenan vosotros también seréis castigados severamente y, posiblemente, también con la condenación.

Os repito, si queréis ser padres de familia, si queréis tener hijos que cuidarMe en la Tierra, meditad bien esto, Mis pequeños, ¿cómo los vais a criar?, ¿de qué vais a llenar su mente y su corazón, para que su alma sea bella ante Mis Ojos o deplorable ante Mis Ojos? Cuando regreséis al Reino de los Cielos, seréis juzgados y vuestros hijos serán juzgados, también, de acuerdo a lo que vosotros hicisteis en ellos. Ciertamente, tienen su libre albedrío y no todos sus actos os van a afectar, pero si no les disteis bases buenas, bases santas que les ayudaran a ellos, recibiréis castigo por no haberlos educado en el Bien, aunque, también, recibiréis Gloria y grandes regalos en el Reino de los Cielos, cuando Me entreguéis hijos que produzcan mucho Bien.
Gracias, Mis pequeños.

Cuarto Misterio. Habla Dios Padre.
Sobre: He puesto Mi Confianza en cada uno de vosotros, os envié al Mundo para producir un Bien y, así, como tenéis en la Parábola de los Talentos, Yo también quiero recoger de vosotros el treinta, el sesenta, el noventa, el cien por ciento de lo que invertí en vosotros.

Una Luz de Esperanza llegará pronto, Mis pequeños, cuando Mi Santo Espíritu os invada y os deis cuenta, primeramente, que estáis en Mi Corazón, que he escuchado vuestras plegarias pero, por otro lado, también conoceréis que Soy un Padre Justo, un Juez Justo, un Creador que os ama, pero que también os reprende cuando hacéis el mal.

Ciertamente os amo, Mis pequeños, y no os imagináis en qué forma, pero cada uno de vosotros tenéis una misión que llevar a cabo. He puesto Mi Confianza en cada uno de vosotros, os envié al Mundo para producir un Bien y, así, como tenéis en la Parábola de los Talentos, Yo también quiero recoger de vosotros el treinta, el sesenta, el noventa, el cien por ciento de lo que invertí en vosotros.

Yo no he escatimado en daros lo mejor, a cada uno de vosotros os di en diferente grado y, también, os voy a pedir de regreso en diferente grado. Si recibisteis un talento, quizá os pida dos o al menos, que hayáis mantenido y aunque sea multiplicado ligeramente ése talento, para el bien de vuestros hermanos y para el bien vuestro. Si recibisteis dos talentos, os pediré tres, cuatro, cinco, porque ciertamente, os di más capacidades, y puse más confianza en vosotros. Pero aquél que recibió tres talentos o más, también le voy a pedir más y espero que ésos talentos se hayan reproducido en el Bien porque, ciertamente, hay almas a las que les he dado grandes talentos y los utilizaron para el mal y hasta para aprovecharse de sus hermanos y quitarles de aquello que produjeron sus pocos talentos.

Os repito, Soy un Juez Justo y os pediré de acuerdo a lo que os di. DadMe lo que podáis, pero dádMelo con todo vuestro corazón, con todo vuestro amor, Mis pequeños, que Yo vea en vosotros, solamente bondad, que deis poco, pero que sea bondad, que lo que hagáis, aunque sea poco, pero que sea en el amor.

Ciertamente, satanás, continuamente os está atacando para que no produzcáis lo suficiente y que podáis salvar almas para el Reino de los Cielos.

PedidMe el don del Discernimiento, para que os deis cuenta por dónde os está atacando satanás y que no os deja obrar libremente. Acudid a Mí, para que Yo os proteja y os dé lo que necesitéis, para que podáis dar, no diez o veinte por ciento, que podáis dar noventa o cien por ciento de lo que Yo os di para trabajar.

Soy un Dios Justo, Soy vuestro Padre que tanto os ama, pero Soy Justo y, también, necesito que vosotros obréis de acuerdo a lo que Yo os pido.

Me debéis retribuir, multiplicado, lo que Yo os di, porque, también, los dones y talentos que Yo os doy, los gozáis durante vuestra vida y Yo quiero que al final de vuestra vida y también durante ella, pueda Yo gozar del bien que estéis produciendo para el Cielo.
Gracias, Mis pequeños.

Quinto MisterioHabla Dios Padre.
Sobre: Los hogares así Bendecidos, darán mucho fruto, vivirán en la alegría, nada les faltará, Yo, vuestro Dios, lo he prometido y mantengo Mi Palabra.

Hijitos Míos, hace algunos años os dije que estabais viviendo segunda generación de almas sin Dios, y ya en estos tiempos, en algunas familias, estáis viviendo terceras generaciones de almas sin Dios.

Esto os lo digo, Mis pequeños, porque satanás sabe, perfectamente, que la mujer es la principal transmisora de los valores espirituales.

La mujer debe de vivirMe fuertemente en el hogar y, quizá, a veces, más que el mismo esposo, aunque el esposo debe ser cabeza en el hogar y, también, dar un ejemplo de Virtud y santidad.

Satanás se las arregló, junto con sus secuaces, a sacar a la mujer del hogar, haciéndole creer que es igual que el hombre, que puede hacer las mismas cosas que el hombre y, no es así, Mis pequeños.

Desde la Creación Yo creé al hombre para ciertas tareas y la mujer para otras y se iban a complementar, para hacer una unidad. Tenéis diferentes metabolismos, deseos, pasiones, no sois iguales, os complementáis.

La mujer se deja llevar más por amor, por su corazón y eso es lo que une el hogar, el amor que produce, principalmente, la madre, en el hogar.

El hombre, llevará lo necesario y dará, también, ejemplo de autoridad en el  hogar, para que todo se desarrolle correctamente.

Os dije, en aquél tiempo, que el hombre lleva la autoridad en el hogar, pero, el hombre, tiene que estar supeditado a la Autoridad Divina, tampoco debe actuar en total libertad, debe seguir los lineamientos que os he puesto a través de los Mandamientos, de Mis Leyes.

El hombre, en el hogar, el padre, no puede actuar ni debe actuar de acuerdo a sus instintos solamente, debe actuar de acuerdo a lo que Yo le he mandado y que está en las Sagradas Escrituras.

Tanto el padre, como la madre, o los esposos, en principio, deben acatar Mis Leyes, y ellas los llevarán a la perfección. Así, el Matrimonio, desde un principio, Bendecido por el Sacramento, deberá estar sometido a Mis Órdenes, pero son Órdenes de Amor, Mis pequeños, para llevar un orden congruente a lo que deberéis crear, que es una familia, pero una familia en Mí, en vuestro Dios, en donde Yo sea lo Primero. Todo será ofrecido a Mí, todo será llevado, en vuestro hogar, a darMe Gloria y agradecimiento.

Un hogar así, será continuamente Bendecido por Mí, en Mi Santísima Trinidad y cuidado por Mi Hija, la Siempre Virgen María y el Señor San José, que eso fue Su Casita en Nazaret un Hogar Divino en la Tierra, en donde, Mi Hijo Jesucristo, nacería después.

Los hogares así Bendecidos, darán mucho fruto, vivirán en la alegría, nada les faltará, Yo, vuestro Dios, lo he prometido y mantengo Mi Palabra.

Cuando, primeramente, Me buscáis a Mí, para que sea el Dueño y Señor de vuestro Hogar, si Me dais a Mí ése lugar, nada os faltará, pero aquellos hogares en donde no Me tomen en cuenta ni busquen Mi Consejo, que no busquen Mi ayuda, para que les resuelva los problemas normales de día a día, no avanzarán, porque no están Conmigo, porque no están buscando Mi Presencia, Mi Sabiduría, Mi Amor.

Mi Esencia es el Amor y si vosotros no la vivís en vuestro hogar, vuestro hogar no avanzará, un hogar donde no se ore, donde no se busque estar en Mi Presencia, donde no se agradezcan Mis Bendiciones día a día, es un hogar que, tarde o temprano, lo destruirá satanás.

Cuando un hogar vive en Mi Amor, cuando en un hogar se ayudan los unos a los otros a crecer en lo espiritual, en lo intelectual, en lo físico, en lo económico, y siempre estoy Yo primero, ése hogar será exitoso.

Mi Hijo os dijo que Él no estaba peleado con lo económico, siempre y cuando no se le diera el primer lugar de vuestros intereses. Lo económico os puede llevar a la santidad, cuando repartís a los pobres y necesitados de lo que tenéis, para que puedan vivir dignamente, eso es Amor, Mis pequeños.

¿Os dais cuenta cómo va trascendiendo lo interno del hogar hacia lo externo, con vuestros hermanos? Esto es lo que se vivirá pronto, Mis pequeños, después de la Gran Tribulación, después de la Purificación que se avecina rápidamente y, agradecédMelo, Mis pequeños, porque quiero vivir ya, en cada hogar, plenamente.

Hay tantos, tantos hogares, en los cuales Yo no aparezco en ningún momento, que solamente se acuerdan de Mí para blasfemarMe por lo mal que les está yendo. Tantos hogares en donde Me han hecho a un lado, no respetan Mis Mandamientos, Mis Leyes, no respetan Mi Amor, porque no lo viven, no lo transmiten, ni dentro ni fuera del hogar.

Por eso os he dicho que el resto fiel es muy pequeño, porque no hay hogares, verdaderos hogares, que estén en Mí y ni desean o no permiten que Yo los ayude.

Es triste que os diga esto, Mis pequeños, cuando Yo os he creado en el Amor, cuando Yo he querido llevaros a la perfección, cuando Yo he querido que vosotros gocéis, que vuestra vida sea de alegría, porque confiáis plenamente en Mí, vuestro Dios, porque estáis Conmigo día y noche y sabéis que Yo nunca os abandonaré ni dejaré que padezcáis dolores innecesarios. Pero el hombre Me ha hecho a un lado de su vida y se ha ido con satanás.

Mucha maldad se vive en los hogares y, por eso, estáis viendo a vuestro alrededor todo lo que se deriva de ellos, porque no estoy Yo en ésos hogares;se están viviendo segundas y terceras generaciones de almas sin Dios y estáis viendo cómo ya no os respetáis los unos a los otros.

Si Mis Leyes no están en el corazón, de una gran mayoría de los hombres, por eso, os matáis los unos a los otros, os aprovecháis los unos de los otros, porque no hay ley en vuestro corazón que detenga vuestras malas inclinaciones.

Veis cómo actúan los gobiernos de la Tierra, porque no estoy ya en sus corazones, satanás los ha tomado y responden según lo que satanás les ha inculcado. No hay amor en ellos, no hay respeto hacia sus hermanos, hacia sus conciudadanos. Los gobernantes no buscan por el bien de su gente ni de su propia familia, sólo buscan el atesorar los bienes que no son de ellos. Y así, toda la maldad se va derivando, precisamente, de los hogares, en donde Yo, ya no vivo.

Los valores los han pisoteado, no buscan vivir en el respeto, en el amor, que son las Virtudes y buscáis que todo se componga, cuando no ponéis nada de vuestra parte, sino al contrario, vais avivando ésa maldad que os rodea, porque os conviene vivirla.

Os he repetido esto, tantas veces, Mis pequeños, y no os queréis dar cuenta que vosotros mismos sois la causa de todo este mal que os rodea, porque Yo, ya no vivo en vuestro corazón, ya no vivo en vuestros hogares, ya no queréis dar ejemplo de que, Yo, aún sigo viviendo sobre la Tierra, en corazones buenos, en corazones que quieren vivir en paz, en armonía y, sobre todo, que quieren vivir Conmigo, vuestro Dios.

Por eso, esta Purificación se tiene que dar, porque Yo, ya no vivo en una gran mayoría de vosotros, Mis pequeños.

Orad, los que sabéis orar y los que no sabéis, aprended, para que os podáis salvar, porque ya es inminente este cambio, Mis pequeños, no puedo soportar tanto dolor que Me causáis vosotros, los que no Me queréis dejar entrar en vuestro hogar  y en vuestro corazón.
Gracias, Mis pequeños.
 www.diospadresemanifiesta.com